Motivos más frecuentes por los que las parejas discuten
Nadie nos enseña a estar en pareja, es complicado tanto en la comunicación, como el entendimiento en ciertos temas. A veces, nos vemos desbordados por algo que no entendemos, una situación que se va yendo de control, sin recordar cómo empezó, pero temiendo cómo acabará. Por ello, es esencial, no solo solucionar los problemas, ya que, en muchas ocasiones, las parejas simplemente quieren estar bien, así que entierran el problema debajo de la alfombra, pero esto lo único que consigue es acumular, hasta que un día se te hace imposible andar por encima.
Por ello, es crucial saber el por qué se discute, el inicio y el por qué de todo. Solo de esa manera podremos solucionar los problemas, porque si no sabemos de dónde viene, no sabremos a dónde ir. Así que, hoy vamos a ver los motivos más frecuentes de por qué una persona discute con su pareja. Porque todo es soluconable si se pone empeño en ello, no hace falta ser drásticos, o dramáticos, hay problemas que son totalmente solucionables, solo hace falta escuchar a la otra persona y escucharnos a nosotros mismos, porque muchas veces se nos olvida poner el foco en nosotros, cuando quizá somos los que hemos desencadenado todo.
Mantén la mente abierta siempre, cuestiona tus palabras y las de la otra persona, y esto no quiere decir que se cree un halo de inseguridad donde no sepas lo que es cierto, quiere decir que es bueno preguntarte por qué, de dónde vienen esas palabras y a dónde quieren ir, qué quieres conseguir tú diciendo o haciendo lo que estás haciendo y qué es lo que quiere decir o hace la otra persona con sus palabras o sus actos.
Siempre hay un por qué para todo, siempre, así que solo tienes que encontrarlo, lo cual muchas veces no es una tarea nada sencilla, pero intenta comunicarte de forma correcta, haz ver a la otra persona tu punto de vista e intenta ver el suyo, seguro que entre medias hay un punto en común, un nexo para encontraros y entenderos, donde es posible una reconciliación. Ya vimos los cuatro fundamentos para una pareja feliz, pero uno de los más importantes es el respeto, porque perder las formas no hace ningún bien a nadie ni a la relación en sí. Así que, ahora vamos a ver los motivos más frecuentes por los que una pareja puede discutir. Todos somos humanos, así que todos podemos caer en ellas en algún momento.
El pasado
Esto es algo muy común y es algo que debemos aprender a dejar atrás, y es el pasado de la otra persona. No importa lo que haya hecho o dicho anteriormente a la relación o incluso en la misma relación hace tiempo, el pasado debe quedar atrás siempre y cuando la persona haya aprendido del error que cometió si ese es el caso.
Tampoco se le puede echar en cara algo que hizo que a ti te parece mal, pero para la otra persona no lo es, no vais a llegar a ninguna parte, debéis centraros en el momento presente y en lo que va a venir, vivir en el pasado es perderse el presente y desde luego, no tener futuro, así que hay que intentar olvidar lo que ocurrió y forjar nuevas historias a partir de ahora.
El futuro
Ocurre lo mismo que con el pasado, centrarse todo el día en lo que está por venir no va a cambiar el hecho de que en algún momento acabéis en ese punto. El futuro es lejano y ambiguo, las opiniones cambian. Si estás todo el día discutiendo sobre algo que crees que pasará, al final pasará, tienes que dejar fluir las cosas o el tiempo te dará en las narices.
El futuro es importante, por supuesto, pero nadie sabe lo que de verdad va a pasar dentro de 30 años, o 10 años, o cinco años ¿Cómo será? No lo sabemos, por eso centrarse en ello demasiado es un error, te impide vivir lo que tienes ahora mismo entre las manos, vivir con tu pareja de forma feliz sin preocuparse por ello. Porque lo peor, es que si te centras mucho en el futuro, y después se rompe, echarás de menos el pasado, y eso sí que es imposible de cambiar ni volver a él.
Las tareas de la casa
No importa si son cosas pequeñas como lavar los platos, o la organización entera de la casa, siempre es un motivo de discusión y siempre encierra cosas más grandes, cosas internas de cada uno de los miembros de la pareja, como por ejemplo el temor a perder el control si la casa está desordenada, o el temor a no ser libre, si una persona se ve obligada a hacer un montón de cosas en la casa que al final, no quiere hacer.
Todo son traumas de cada personas y por eso es totalmente vital que se conozcan y se expongan a la otra persona, para que ambos sepan a lo que se atienen. La vulnerabilidad es totalmente clave, así que muestra tus cartas, sé quien eres, solo de esta manera podrás tener una vida feliz, tanto contigo mismo o contigo misma, como con tu pareja. Y, por supuesto, no es tarea sencilla, pero por algo sencillo se empieza, como las tareas de la casa, exponiendo por qué realmente se hace algo o por qué no se hace, o porqué te importa que se haga una tarea sencilla como cambiar un armario de sitio, o la razón por la que no quieres hacer la cama todos los días.
Todo ello aporta una realidad en cuanto a los conflictos internos de una persona, y esas son las armas para combatirlo, juntos, saber por dónde empezar para llegar, de nuevo, a un acuerdo mutuo para tener una vida feliz plena.
Tiempo libre
En vacaciones, tanto en verano como ahora en Navidad, son las épocas donde más rupturas de pareja hay, y no es casualidad, ya que demasiado tiempo juntos es motivo más que suficiente para que se creen fricciones en la pareja y esto lleve a discusiones que finalmente acaben en ruptura. Pasar tiempo juntos siempre está bien, pero también necesitáis espacio a solas, para vosotros y vosotras mismas, por ello, demasiado tiempo juntos hace que nazcan cosas que quizá no estaban ahí o estaban de forma más leve.
Sexo
El sexo en una relación es importante, de hecho, esencial, si no os entendéis en la cama, muy probablemente no os entenderéis fuera de ella. El sexo es intimidad, es pasión, es acercamiento y conexión. Todas esas cosas son la base de una relación que se juntan cuando se tienen relaciones sexuales, por ello, es clave hacer que el sexo sea perfecto para ambos, porque no vale con que una sola persona lo pase bien, el sexo es cosa de dos, siempre, y sino disfrutar por igual, entonces hay un problema.
Está demostrado que una pareja con una vida sexual activa y gratificante son muchos más felices y duraderos, aunque es cierto que muchas veces se enmascaran los problemas reales de la pareja a través del sexo, lo cierto, es que no existe una pareja totalmente feliz, sin tener una vida sexual plena, por lo que hay que poner empeño y atención a ello para que ambas partes disfruten todo lo posible.
Celos y miedo
Al final, los celos son miedo, inseguridades de uno mismo que se proyectan en la otra persona, pro lo que hay que controlarlo y sobre todo, eliminarlos. Porque muchas veces son infundados por la idea de la monogamia y de la posesión, solo si asumes que la otra persona no es tuya, no tendrá ninguna necesidad en irse con otra persona, la libertad es la clave de la felicidad, siempre. La vida siempre os pondrá retos, pero se pueden superar.
No tengas miedo de que tu pareja pueda estar engañándote, aunque es cierto que a veces pasa, si de verdad ponéis atención a todo lo anteriormente nombrado, no existirá ese problema, y si por alguna razón lo vuestro se acaba, no pasa nada, habéis disfrutado que es lo que cuenta, no te centres en que tienes que estar con una persona toda la vida, una vida entera es mucho tiempo, disfruta del momento y de tu pareja plenamente y quizá sea para siempre o quizá disfrutes mucho tiempo de ello, en cualquier caso ambos ganáis.
Solo queda poner en práctica todo esto y minimizar las broncas, aunque siempre las habrá por supuesto, pero todo es solucionable con un poco de paciencia y escucha.