La Artrosis en las manos es un tipo de artrosis, caracterizado por su afectación en las articulaciones de las manos.
La artrosis es una enfermedad degenerativa que afecta a las articulaciones y que suele aparecer en personas a partir de 50 años, siendo rara en personas jóvenes. Consiste en el desgaste del cartílago que contiene cada articulación, y que une los extremos de los dos huesos que la componen. Este desgaste puede provocar la desaparición completa del cartílago, momento en que los huesos pueden tocarse, creando mucho dolor.
Actualmente, se considera una de las enfermedades más frecuentes en nuestro país. El porcentaje se sitúa en el 28% de la población mundial. Los movimientos quedan limitados un 80%.
No existe tratamiento para curar esta enfermedad, pero si que existen fármacos que retardan su avance y disminuyen el dolor y la rigidez, por lo que permiten que la calidad de vida de la persona sea buena.
Existen diferentes tipos de artrosis, en función del sitio donde se encuentre la articulación afectada. La artrosis de rodilla es la más habitual, aunque también existe la artrosis cervical o de cuello, la artrosis de cadera y la artrosis de mano. En este artículo nos centraremos en este último tipo de artrosis: La artrosis de mano.
La artrosis de mano
Recibe este nombre la artrosis que afecta a las articulaciones de las manos. Es la segunda más frecuente que existe, suelen padecerla las mujeres, sobre todo aquellas a las que ya les ha llegado la menopausia, y generalmente suele heredarse de madres a hijas.
El inicio de la enfermedad se da en la articulación y se expande al resto de la mano. El dolor que produce es intenso, aunque en ráfagas irregulares. Las condiciones climatológicas y el movimiento de la articulación pueden generar dolor.
Las articulaciones que suelen afectarse son la articulación interfalángica distal y proximal, la articulación metacarpofalángica y la trapecio-metacarpiana. En función de la articulación afectada, tendremos 5 tipos de artrosis de manos: Artrosis de las interfalángicas distales, de las interfalángicas proximales, metacarpofalángicas, trapeciometacarpiana y del carpo
Con el tiempo, los dedos se deforman. Cuando esto ocurre, el dolor de mano es menor, aún así resulta difícil de llevar debido a la dificultad de pinzar objetos con los dedos, cada vez más difícil debido al avance de la enfermedad y a la deformidad de los dedos.
Causas de la artrosis de mano
La artrosis tiene unas causas, estas son:
- La edad: Es más frecuente que la artrosis de mano aparezca con 50 años o más, sobre todo en mujeres que han entrado en la menopausia.
- Genética: La artrosis se puede heredar de madres a hijas, habiendo un 65% de probabilidad de heredarla.
- Fracturas y traumatismos: Si hemos sufrido una fractura, lesiones o traumatismo en alguna articulación, puede que el cartílago haya quedado dañado, por lo que podría tener artrosis. Si la articulación dañada está situada en la mano, estaríamos ante un caso de artrosis de mano.
Síntomas de la artrosis de mano
Existen tres síntomas generales para todos los tipos de artrosis:
- Dolor: El dolor va a ráfagas; existen días que la artrosis no duele, mientras que existen otros que duelen mucho.
- Rigidez: Es muy difícil mover los huesos de la articulación desgastada, pues se mantienen rígidos
- Pérdida de movilidad: La articulación que contiene el desgaste se vuelve más disfuncional, pues le cuesta moverse y tener la misma fuerza que cuando la enfermedad no se había pronunciado.
Estos tres síntomas son comunes para cualquier tipo de artrosis. Si nos centramos en la artrosis de la mano, encontramos otros síntomas adicionales como:
- Hinchazón de manos
- Crujido a la hora de doblar los dedos
- Deformación: Los huesos de los dedos se deforman ante la dermatitis, en fases avanzadas.
¿Cómo saber si tengo artrosis?
El primer paso que se necesita antes de contestar a esta pregunta es detectar cualquier posible síntoma que nos haga sospechar. El más fácil de detectar es el dolor, aunque es importante que vaya acompañado de los otros dos síntomas para que el diagnóstico sea correcto.
En caso de sospecha, deberemos visitar al médico. Este preguntará al paciente sobre los síntomas que está experimentando. Paralelamente, podrá realizar otras pruebas, como una exploración y una radiografía de las manos y dedos. De esta manera, el médico podrá diagnosticar artrosis, si procede. Recetará tratamiento que deberemos de cumplir hasta finalizarlo.
Diferentes tratamientos
Actualmente, existen diferentes tratamientos médicos. Será el médico quien decidirá que tratamiento debe aplicar a cada paciente, en función de su gravedad y del tiempo que lo está sufriendo.
Tratamiento farmacológico
Se realiza tratamiento farmacológico con fármacos tomados por vía oral. El tratamiento se basa principalmente en dos tipos de fármacos: Analgésicos y antiinflamatorios de acción rápida, u otros medicamentos de acción lenta.
Suelen recetarse medicamentos como paracetamol y/o ibuprofeno. Te invito a leer el artículo Cómo tomar ibuprofeno en dosis.
Cirugía
La cirugía se encuentra en la última opción de los tratamientos médicos, solo disponible en casos extremos, cuando la medicación no puede controlar el avance de la enfermedad.
En ella, se pone una prótesis que hace función de cartílago, para que los huesos no choquen entre si al crear movimiento.
Consejos para la artrosis de manos
Existen algunos consejos que nos van a permitir mejorar este problema en las articulaciones de las manos. Se basan en tareas fáciles y cortas. Entre ellas, encontramos:
En las fases de dolor
- Aplicar calor en la articulación afectada. El calor es un antiinflamatorio que ayudará a evitar el dolor.
- Mantener reposo relativo de la zona afectada. El reposo hace descansar la articulación, por lo que el dolor mejora.
Realizar ejercicio con la mano
Ejercicios como flexionar, tensar y destensar y estirar los músculos de la mano pueden resultar muy útiles para fortalecer la musculatura. De esta manera, mejoramos la movilidad. Puede ser útil ayudarnos de algún objeto, como:
- Una pelota blanda que nos permita apretarla y descansar.
- Mover los dedos sumergidos en agua
- Sacar cerillas de su caja
- Coger monedas del monedero
- Pinzar objetos pequeños
Evitar la obesidad es también muy recomendable para prevenir otros tipos de artrosis. En este sentido, te invito a saber cómo adelgazar 10 kilos leyendo este post.
Otros consejos a la hora de cocinar
Cuando cocinamos, usamos mucho nuestras manos. No solo para realizar la receta en si, sino para sacar de los estantes todo lo que necesitamos. Generalmente, suelen ser ollas y sartenes pesadas. Por ello, existen unos consejos a la hora de cocinar:
- Cambiar los utensilios que más pesen por unos ligeros, hechos de pllástico y aluminio.
- Cuando necesitemos coger un vaso o cualquier recipiente que no tenga asa, lo deberemos coger con las dos manos para evitar caídas. De la misma manera, los platos se deben sujetar por debajo, y no por los lados.
- A la hora de exprimir, pelar o batir, es mejor usar electrodomésticos que lo hacen solos o casi sin ayuda.
- En caso de que cueste desenroscar un bote o cualquier tapón, resultará más cómodo hacerlo con un abridor.
- Es recomendable que el grifo sea monomando en vez de rosca.
- Si necesitamos cargar con una olla llena de agua hasta el fuego, es preferible ponerla vacía e ir llenándola con envases más pequeños.
- Lavar a mano los platos usando agua caliente ayuda a aliviar el dolor.
Otros consejos
- Usar un carrito para llevar la compra del supermercado a casa es mucho mejor para nuestras articulaciones que cargar las bolsas con las manos. En caso de tener que cargarlas, evitaremos colgarlas de la muñeca y lo haremos en el antebrazo y hombro.
- Los pomos de las puertas pueden causar dolor. Es mucho más recomendable cambiarlas por palanca o manilla.
- No cargar con libros. Si vamos a leer, podemos usar un atril.
- Escribiremos de manera mucho más fácil con material de escritura grueso.
- Si abrochar botones cuesta, podemos usar velcro
A modo de conclusión
La artrosis de mano es el segundo tipo más frecuente en personas mayores de 50 años. Debido a que las manos cuentan con muchas articulaciones, encontramos cinco tipos de artrosis de manos.
La artrosis de manos tiene buena evolución, pues el dolor puede desaparecer con el tiempo. Por contra, produce una deformación de los dedos de las manos muy característica, aunque no impide trabajar con ella.
Las causas suelen ser genéticas. Este tipo de enfermedad se hereda de madres a hijas, y aunque generalmente lo padecen las mujeres, los hombres no están excluidos de poder padecerlo.
Los síntomas de la artrosis de manos son dolor, rigidez y pérdida de movilidad, además de crujidos, hinchazón de manos y deformación. El dolor va y viene según ráfagas. Es importante aplicar calor en momentos de dolor y no mover demasiado las articulaciones, hasta que el dolor cese.
El tratamiento puede ser farmacológico, con dos tipos de fármacos que el médico recetará a su criterio, o quirúrgico, en casos avanzados.
Se recomienda seguir unos consejos para prevenir esta enfermedad: realizar ejercicio, aplicar calor y reposar cuando venga el dolor, intentar evitar coger peso con las manos, así como bolsas. Además, existen trucos a la hora de cocinar y vestirse que pueden resultar útiles para personas con artrosis de manos (como cambiar menaje por otros de plástico, mucho más ligeros, cambiar los botones por velcro y cambiar los pomos por manillas, entre otros.
Lo más importante a la hora de detectar y tratar una artrosis, sea del tipo que sea, es visitar al médico para que él determine si nuestras dolencias se deben a artrosis o a otras enfermedades. Una vez el médico haya pautado tratamiento, deberemos tomarlo en función a lo recetado. De esta manera, la mejoría estará garantizada.