Acetona – Causas, Detección y Tratamiento

0 1.848

La acetona es una enfermedad propia de los niños, también conocida como cetoacidosis, ocurre cuando el cuerpo tiene una alta cantidad de cuerpo cetónicos que el riñón no da a basto para eliminarlo y el niño los elimina vomitando.

Es una enfermedad benigna, que suele afectar a niños de 3 a 5 años, es muy raro que aparezcan cetonas antes de cumplir el año. Suele estar relacionada con la alimentación y la actividad física del niño. Aunque a veces lo puede provocar otra enfermedad cómo la diabetes infantil.

Hoy desde el equipo de SaludRespuestas te explicamos todo lo que debes saber acerca de la acetona en niños.

Crisis de acetona

Las reservas de azúcar se agotan de una manera más rápida en los niños, por ello el organismo del infante, se ve obligado a usar la grasa cómo combustible energético.

De la descomposición de la grasa en el hígado se liberan diferentes sustancias: los cuerpo cetónicos, los cetoacetatos y la acetona, estos salen a torrente sanguíneo para llegar a los riñones y ser excretados en la orina. Pero si la glucemia del niño no es la adecuada, no pueden excretarse correctamente y se comienzan a acumular en la sangre. Cuándo se acumulan de una manera tan exagerada, el niño elimina esta acetona vomitando.

No se trata de una enfermedad infantil, sino de una defensa del organismo a quedarse sin azúcar. El niño pequeño es muy energético y curioso, por lo que requiere tres veces más azúcar que un adulto para evitar que sus reservas se agoten.

Síntomas de la acetona

  • Hipoglucemia sérica, la falta de reservas energéticas de azúcar se refleja en la sangre.
  • Halitosis: el proceso de liberación de acetonas hace que el aliento tenga un olor característico cómo el del quitaesmalte.
  • La orina presenta un olor fuerte, por la concentración de cuerpos cetónicos.
  • El olor corporal del niño también es fuerte, como a fruta podrida por la exudación de cetonas por sudor.
  • El niño puede presentar somnolencia e irritabilidad, jaquecas, calambres en el estómago y ojeras.
  • Boca seca
  • Fiebre, debes tener mucho cuidado ya que la fiebre acelera aun más el metabolismo y puede complicar el proceso.

¿Qué provoca acetona?

  • Si el niño no desayuna bien, o simplemente no desayuna, el cuerpo no tiene las necesidades de azúcar cubiertas y comienza a usar la grasa.
  • Que el niño no tenga una alimentación equilibrada y se abuse de los fritos y la comida rápida.
  • Haber tenido fiebre: la fiebre es un proceso natural del cuerpo ante un agente que le ataca, pues también provoca un aumento en el metabolismo, esto es, una mayor necesidad energética. Si a esto le añadimos que el niño puede experimentar anorexia a causa del malestar, el proceso se complica en cuestión de horas.
  • Vómitos: Aquí tenemos la pescadilla que se muerde la cola, por un lado el niño puede vomitar sin causa aparente, al hacerlo elimina las sales, el agua y el azúcar, ante la ausencia de azúcar el niño comienza a usar las grasas, que liberan cuerpos cetónicos a la sangre y el niño inicia una crisis de acetona. El caso contrario es que un niño ya con acetona al vomitar elimina las reservas que tiene, haciendo que se liberen aún más cuerpos cetónicos.

Cómo detectar la acetona

Cómo hemos mencionado al inicio de este artículo, las cetonas se eliminan por la orina y se exudan por el sudor y la respiración, pues podemos detectar la cantidad de cetonas de 3 maneras:

  1. Un análisis de sangre: se detecta en el torrente sanguíneo una gran cantidad de cuerpos cetónicos.
  2. Mediante la orina: con unas tiras reactivas, puedes comprobar la presencia de acetona en la orina en tu hijo.
  3. Una forma más compleja es examinar el aire expirado por el niño para ver la cantidad de cuerpo cetónicos que libera.

Tratamiento de la cetosis

 

El niño puede tomar una manzanilla endulzada con miel o azúcar, poco a poco, ya que un aporte muy rápido de azúcar puede hacer que siga vomitando.

También puede beber zumos de frutas, siempre poco a poco para asimilar bien la glucosa.

Si el niño responde bien a las bebidas se debe ir incluyendo en la dieta alimentos cómo las galletas o el yogur, poco a poco, sin forzar las niño a comer.

Si el niño ha sufrido un empacho de dulces o de fritos y presenta vómitos cíclicos, se debe cambiar la dieta del niño, siempre aportando muchos hidratos de carbono complejos (cómo serían las féculas, las leguminosas y cualquier tipo de verdura en general) y pocas grasas. En este caso el niño podría comer purés o la propia verdura sin triturar, arroz hervido y pescado. Es decir comidas ligeras que pueda digerir con facilidad.

Si a pesar de llevar a cabo estas medidas, la acetona del niño va en aumento, se debe visitar al pediatra para que lo valore.

Cómo evitar la acetona en niños.

Algunos médicos afirman que existen unos consejos que podemos seguir para evitar que el niño sufra una crisis de acetona:

  • Desayunar bien: No querer desayunar es un problema muy típico de los niños, que por pereza al levantarse o por desgana, no desayunan o no lo hacen correctamente. Durante la noche, los depósitos de glucógeno se agotan, el desayuno es la forma más rápida de «ponernos las pilas» y poder afrontar el día. Si el niño no desayuna, comienza a utilizar la grasa de reserva desde primera hora, iniciando así la producción de cuerpo cetónicos.
  • Llevar una dieta equilibrada: Se debe prestar mucha atención a la dieta del niño y que sea sana y equilibrada, se debe tener cuidado con las grasas y los azúcares, que los puede comer pero en su justa medida.
  • Si el niño practica deporte debe mantenerse bien hidratado y comer después de la actividad física para recuperar las sales y el azúcar perdidas durante la actividad física.
  • Coger la fiebre a tiempo no podemos planear ni planificar si el niño va tener fiebre, pero si podemos actuar de forma rápida para evitar que provoquen al niño una crisis de acetona.
  • Del mismo modo no podemos saber si el niño va vomitar, pero cortar los vómitos y comenzar a hidratar y dar al niño las sales y nutrientes perdidos, puede hacer que no alcance una crisis de acetona.

Diabetes en niños

En algunas ocasiones esta acetona se produce por una enfermedad anterior, es el caso de la diabetes infantil.

Ocurre cuando existe una insulinopenia o déficit de fabricación de insulina por parte del páncreas. Este hecho dificulta el uso y la reserva de la glucosa sérica por lo que el cuerpo se ve forzado a usar las grasas de reserva, liberando al torrente sanguíneo lo siguientes compuestos: acetona, cuerpos cetónicos y cetoacetatos que provocan al niño vómitos cíclicos o cetoacidosis.

Es muy importante acudir al médico si la acetona se prolonga más de 24 horas para examinar al niño y descartar complicaciones.

Desde el equipo de SaludRespuestas ponemos a tu disposición toda la información disponible acerca de la acetona, pero no sirve de diagnóstico médico ni sustituye la opinión de un profesional, si crees que tu hijo podría estar pasando por una crisis de acetona acude a tu centro médico más cercano para que lo examinen.

 

¿Te ha gustado?
2 usuarios han opinado y a un 50,00% le ha gustado.
También podría gustarte
Deja un comentario

Tu dirección de email no será publicada.