Cómo actuar ante una taquicardia
Es muy probable que al menos conozcas a una sola persona que ha tenido el problema conocido como taquicardia. Una taquicardia o taquiarritmia es un problema bastante más común de lo que se cree, ya que su relación con la ansiedad y el estrés que debemos soportar en nuestro día a día hace que esté más presente de lo que todos nos pensamos.
Una taquicardia es simplemente una alteración en los latinos del corazón, haciendo que estos latan más rápido de lo normal. Este problema lo que hace es que tengamos problemas a la hora de tener una vida normal, ya que sentimos como que el corazón va demasiado deprisa.
En estos casos, estas personas que tienen taquicardia se van a sentir muy mal cuando las tengan, ya que van a sentir que el corazón va a mil por hora literalmente. Por este motivo, debemos aprender cómo actuar ante ellas, para así evitar males mayores.
Esto se debe a que podrían derivar en algo peor, como por ejemplo un infarto de miocardio o una angina de pecho, además de algunos daños en el corazón por forzarlo demasiado.
Lo malo es que no es tan fácil tratar una taquicardia como parece, ya que como las hay de tantos tipos y causadas por tantos factores, hay que actuar de una forma ligeramente diferente en unas o en otras. Además, no es lo mismo actuar ante una taquicardia que nos está pasando a nosotros mismos, que hacerlo ante una que le ocurra a otra persona.
Lo que hay que hacer en estos casos es primero determinar la causa de la misma y después, aprender a actuar ante los dos tipos, es decir, cuando nos ocurre a nosotros o cuando le ocurre a otra persona.
Vamos a ver primero sus causas y luego vamos a ver cómo debemos actuar ante ellas. De esta forma, siempre vamos a lograr evitar males mayores, ya que la información es el arma más poderosa que tenemos actualmente.
Causas de la taquicardia
En primer lugar, tenemos que determinar el por qué está causada la taquicardia, ya que como acabamos de decir, al haber tantas causas, hay que estar preparado para todos los tipos. No es lo mismo actuar ante una taquicardia producida por ansiedad, que actuar ante una producida por colesterol, así que siempre debemos de tener cuidado ante todos los tipos.
Por eso, veremos a fondo todas las causas de las taquicardias, para que de esta forma, puedas tratar de curarlas mucho más fácilmente.
- Ansiedad: Esta es sin duda la causa más común de las taquicardias, ya que tener ansiedad provoca que el corazón lata mucho más deprisa. La ansiedad puede ser temporal o puede estar causada de forma crónica.
- Estrés: Cuando estamos muy estresados por algo, el cuerpo va a generar cortisol, un potente estimulante que causará que el corazón lata demasiado deprisa, algo que puede ser peligroso para nuestra salud. Por este motivo, debemos tener siempre mucho cuidado en estos casos.
- Abuso de estimulantes: A las personas que toman demasiado café, Coca cola o bebidas energéticas les puede ocurrir algo así. Esta clase de bebidas hacen que el corazón lata demasiado deprisa, así que si eres adicto a las mismas, es normal que tengas taquicardias.
- Colesterol alto: Aunque parezca mentira, el colesterol también acelera los latidos del corazón. Esto es porque el corazón necesita hacer más fuerza para que la sangre pase por los tapones de colesterol de las arterias.
- Sedentarismo: Llevar una vida demasiado sedentaria es causante de las taquicardias, ya que las personas que no se mueven del sofá, tienen un corazón débil, que necesita muchas pulsaciones para poder hacer su función normal, causando así que los latidos del corazón aumenten para compensar la debilidad de tu corazón.
- Exceso de deporte: Eso si, si llevamos una vida demasiado activa vamos a tener los mismos efectos del sedentarismo, ya que el corazón va a tener que hacer muchos esfuerzos y va a acabar dañado y cansado a largo plazo.
- Abuso de drogas: Las drogas estimulantes como la cocaína, el speed y demás, hacen que el corazón lata demasiado deprisa. Estas drogas estimulan directamente el sistema nervioso central, así que hay que tener cuidado con ellas.
- Genética: Algunas personas tienen defectos congénitos en el corazón, los cuales provocan que éste vaya más rápido de lo normal, causando así este tipo de taquiarritmia.
- Insomnio: Si no duermes suficientes horas, debemos tener cuidado, ya que el corazón hará más esfuerzos por mantenerte despierto y por este motivo, tendrás las taquicardias.
Tratar una taquicardia propia
En primer lugar, vamos a ver cómo podemos tratar una taquicardia propia, es decir, una que nos esté pasando a nosotros en concreto. En este tipo de taquicardias, debemos de vigilar muy bien nuestro pulso cardíaco, ya que sólo nosotros nos vamos a dar cuenta de lo que está pasando.
Notarás que tienes una taquicardia cuando notes los latidos muy rápido, tanto que los escuchas sin tener que medirte el pulso. También notarás un ligero pinchazo en el pecho y una sensación de estrés y ansiedad. Una vez que lo detectes, es la hora de actuar.
Relajarnos para calmar la taquicardia
Lo más importante es ponerte en un lugar a la sombra y tumbarte si es posible, ya que debes calmarte lo antes posible para que las taquicardias cesen. Trata de que nadie te moleste y así puedas hacer que el ritmo del corazón vuelva a su estado natural lo antes posible. Evita estresarte y si puedes, toma una valeriana o una infusión de manzanilla. De esta forma, lograrás calmar un poco la taquicardia.
Si ves que es muy grave, llama a los números de emergencia. Si ves que estás tan agotado que no puedes hacerlo, trata de avisar a alguien para que lo haga por ti. En este caso, el médico te administrará un sedante o un calmante para tratar de calmar los latidos de tu corazón lo antes posible.
Acudir al médico
Si has tenido un episodio de taquicardia, debes acudir al médico, aunque no haya hecho falta llamar a la ambulancia. Esto es para que determine si es por ansiedad o por algún abuso de algo, ya que es posible que haya que hacer un lavado de estómago o tratar las taquicardias de otra forma.
Como siempre decimos, debes tratar de seguir las instrucciones del médico al pie de la letra, ya que es el único que tiene facultad suficiente para determinar el mejor tratamiento para la enfermedad. Nunca me cansaré de decir que nosotros sólo tenemos que ser vistos como una guía informativa y una referencia, nunca como un diagnóstico, ya que no somos médicos.
Tratar una taquicardia ajena
Ahora que ya sabemos actuar ante una taquicardia propia, vamos a ver cómo podemos actuar ante la taquicardia de algún conocido, amigo o familiar, ya que en estos casos, debemos comprometernos a cuidarlos. La omisión de socorro es un delito en España, así que debemos siempre estar preparados ante este tipo de eventos.
Las taquicardias en personas ajenas son más difíciles de detectar, ya que no estamos allí para ver su corazón. Sin embargo, si vemos a las personas muy alteradas y tendidas, es cuando debemos de actuar de inmediato. Si es posible, mide el pulso a la persona para poder determinarlo mejor.
Relajar al paciente
Al igual que con las taquicardias propias, debemos en primer lugar mantener al paciente lo más relajado posible. Esto se debe a que el paciente debe de poder relajarse y de mantener los latidos del corazón más estables, es decir, que vayan recobrando la normalidad cuanto antes.
En este caso, lo que debemos hacer es apartarlo en un lugar y dejarlo respirar, sin agobiarlo demasiado. De vez en cuando monitoriza su pulso y si tienes alguna valeriana a mano, dásela. Eso sí, nunca le des calmantes ni medicamentos relajantes sin la guía de un médico, ya que esto lo podría poner peor.
Llamar a emergencias
Ahora que ya está más calmado, vamos a ver cómo va evolucionando el paciente. Si ves que se ha recuperado, dile que acuda al médico y si es preciso, pásale el enlace de este artículo para que sepa cómo actuar. Si no se recupera, debes llamar a emergencias.
Debes quedarte con él y nunca dejarlo sólo hasta que la ambulancia llegue. Aquí ellos ya se quedarán al mando y sabrán exactamente todo lo que deben hacer. Recuerda que los profesionales del sector son ellos y que tu ayuda se debe limitar a unos primeros auxilios.
Prevenir la taquicardia
Ahora que ya sabemos cómo tratar una taquicardia, vamos a ver cómo podemos prevenirla. Como siempre decimos, la mejor curación es la prevención y más vale prevenir que curar. Además, en la mayoría de casos prevenirla es fácil, ya que tan sólo debemos de evitar realizar las causas de la misma.
Lo más obvio es evitar las drogas, el tabaco y demás estimulantes. Además, la cafeína se debe reducir mucho, ya que es una de las mayores causantes de las taquicardias en nuestra sociedad, aunque por supuesto por algún café al día no pasa absolutamente nada, aunque no hay que abusar de ellos. Al contrario de lo que se cree, el café es lo que más cafeína tiene, incluso más que las bebidas energizantes, así que no hay tomar cafés como si no hubiera un mañana.
En segundo lugar, lleva una vida activa, con una dieta sana para evitar el colesterol y evitando el sedentarismo. Eso sí, tampoco hagas locuras como correr una maratón diaria y cosas así, porque eso es malísimo para la salud y se debe evitar a toda costa. También debes vigilar tu pulso si crees que puedes tener este tipo de dolencia y parar de hacer ejercicio cuando el pulso sea demasiado alto. Una buena forma de vigilarlo es con una pulsera inteligente, la cual monitoriza el pulso en todo momento.
Si tienes ansiedad, debes acudir al médico para que te dé la mejor guía para prevenir que te den estos ataques y por lo tanto, te den taquicardias. En la mayoría de casos se te recomendará una vida muy tranquila, evitando el estrés, la vida nocturna y tratando de no tomar drogas. En algunos casos, se recetarán tranquilizantes como el trankimazin o el Diazepam, los cuales nunca se deben tomar sin receta.
En el caso de las arritmias temporales a causa del estrés o la vida demasiado activa, recuerda parar un poco, ya que el exceso de trabajo no es bueno para la salud. Hay que tener siempre en cuenta que la salud debe ser siempre lo primero, ya que cuerpo sólo tenemos uno, pero trabajos hay muchos.
Finalmente, recomendamos un chequeo anual en el médico, el cual determinará nuestro estado de salud y si tenemos alguna predisposición a esto. Monitorizar nuestra salud no cuesta nada, es más, seguro que nos va a ahorrar muchos disgustos.
Hola, sufro de taquicardia y aún no tengo diagnóstico. Excelente artículo, explica muy claramente lo que sentimos cuando nos da. Gracias!