Cómo masturbar a tu pareja
Para muchas personas, el sexo resulta imprescindible en una relación sentimental. El acto sexual consentido es síntoma de que la relación funciona bien, siempre y cuando se haga de manera sana y limpia. No obstante, no solo las personas que tienen una relación sentimental realizan sexo; también encontramos relaciones sexuales, que se basan símplemente en estas prácticas, sin ninguna implicación emocional. E incluso existen ocasiones en las que no son necesarias ningún tipo de relación para disfrutar de un ratito de sexo, muchas personas que se suelen masturbar.
Para muchas personas, además, el sexo es una necesidad. La masturbación nos permite disfrutar de él sin necesidad de tener otra persona con la que practicar. Aunque, si tenemos la suerte de tenerla, las posibilidades de practicar sexo aumentan; y no solo nos referimos al sexo en el que se produce penetración, sino también a la masturbación. Masturbar a la otra persona, o dejar que la otra persona nos masturbe a nosotros, es una práctica que produce igual placer y, por tanto, sirve como práctica a introducir en cualquier momento sexual, se consume o no con una penetración.
Por ello, es importante saber masturbar a tu pareja. Aquí te damos unas claves para que puedas ser un experto o experta en este arte. Tu pareja te lo agradecerá.
El arte de la masturbación
Aunque siempre ha existido un cierto pudor a admitir que son muchas las personas que se masturban, lo cierto es que poco a poco la sociedad va abriendo la mente. Actualmente, son muchas las personas que admiten que realizan esta práctica de manera individual, y que la incluyen en los encuentros sexuales con sus parejas.
Masturbarse a si mismo es relativamente fácil, pues somos conscientes de nuestras sensaciones, y en función de ello cambiamos nuestros movimientos o la rapidez en la que los hacemos. Pero, cuando masturbamos a otra persona, no somos conscientes de sus sensaciones y por tanto, no siempre es evidente si le está gustando o no, y en que medida. Por ello, es importante conocer el arte de la masturbación.
En función de si se masturba a un hombre o a una mujer, las técnicas de masturbación varían. También varían en función de los gustos de cada persona. Sea como sea, existen unas técnicas que suelen funcionar tanto a hombres como a mujeres. Aquí veremos estas técnicas, para que podamos convertirnos en expertos de la masturbación.
Cómo masturbar a un hombre
Como sabemos, la masturbación a un hombre se produce realizándole un masaje en el pene. Este masaje debe ser estimulante, para conseguir una excitación alta que le haga llegar al orgasmo. Aunque podemos escoger muchos objetos y partes del cuerpo para conseguirlo, lo normal es que se produzca con las manos de la otra persona. Con ellas, manipularemos el pene de manera que tenga un momento más que placentero.
Algunas técnicas para mover el pene y realizar una buena masturbación, son:
Descubre los gustos del hombre
Existen unas premisas básicas para masturbar que a todos los hombres les suele gustar. No obstante, siempre existe la excepción que confirma la regla, y por ello, deberás molestarte en saber que es lo que le gusta en este ámbito. No tienes que preguntárselo si no quieres, a pesar de que su respuesta podría darte mucha información. Puedes descubrirlo en el momento de la masturbación. Para ello, prueba diferentes movimientos, aprieta su pene con diferentes intensidades, mueve tu mano de manera más rápida, y luego más lenta, por momentos. Observa su reacción; su cara, su respiración, sus gestos.
Originalidad ante todo
A la mayoría de los hombres les gusta que la masturbación llegue en un momento en la que no se la esperen. Por ejemplo, puedes aprovechar cuando se esté duchando, para unirte y dejar claras tus intenciones. O también puedes despertarlo por la mañana poniéndote en acción. O aprovechar un momento en que se esté cambiando, o incluso un momento de concentración por su parte. Es muy probable que deje lo que esté haciendo y se concentre en el momento. Tu espontaneidad marcará la diferencia.
La postura
La masturbación puede darse tumbado, sentado o de pie. Existen hombres que prefieren estar de pie durante el acto sexual, pues así llegan antes al orgasmo y les resulta más placentero. Pero los hay que prefieren estar más cómodos, y prefieren un buen asiento o incluso la cama.
Saber marcar el ritmo
El ritmo es un factor clave para que nuestro chico llegue al orgasmo. Además, nos permite retardar este momento, y cuanto más se retarde, más placentero será. El ritmo rápido y constante acerca el momento. Puedes acelerar el ritmo a medida que van pasando los minutos. Cuando notes que el orgasmo está cerca, mueve tu mano más despacio. Juega con ello durante un ratito. Así retardarás el orgasmo, al mismo tiempo que lo harás más placentero.
Si realizas sexo oral, cuidado con las enfermedades de transmisión sexual. Si sufres de herpes labial con llagas en la boca, puedes transmitirle herpes genital. En casos extremos, se puede contagiar el SIDA
Aprieta lo justo
Tus manos deben ajustarse al pene del hombre, y ejercer la presión justa para que no quede demasiado suelto, pero tampoco demasiado apretado. Con esta presión justa deberás seguir hasta que consiga el orgasmo.
Cómo masturbar a una mujer
Para masturbar a una mujer, debemos estimular su clítoris. La mayoría de las mujeres son clitorianas, es decir; llegan al orgasmo única y exclusivamente con la estimulación del clítoris. Por ello, por mucha penetración que les realicemos, solo llegaran al climax si, al mismo tiempo, frotamos la zona donde se halla este magnífico interruptor.
Aprende lo que le gusta
Al igual que el hombre, la mujer también tiene unas preferencias a la hora de masturbarse. Conocerlas marcará la diferencia en nuestra práctica. Algunas mujeres prefieren que el roce sea lento, otras que sea rápido, otras que sea fuerte y otras que sea suave. Mantén contacto ocular para conocer lo que le gusta, en función de sus gestos, sus movimientos y su respiración.
Llega hasta el fondo de la vagina
Para ello, es importante conocer la anatomía de una vagina. La vagina tiene dos tipos de labios: los exteriores y los interiores. Dentro de los interiores es donde encontramos las terminaciones nerviosas, por tanto, es aquí donde deberemos llegar para provocar un orgasmo. No obstante, podemos acariciar estos labios porque a muchas mujeres, les gusta esa sensación.
Encuentra el punto G
El llamado punto G es la zona más placentera de la mujer. Llegar a él puede ser bastante complicado, si no sabemos acceder. Para llegar, deberemos meter en la vagina un par de dedos, pues se encuentra en el interior. Asegúrate de que la vagina esté bien hidratada, pues si no lo está, podrás hacer daño.
Una vez tengas los dedos dentro de la vagina, con las yemas hacia arriba (con solo medios dedos basta), deberás hacer movimientos circulares con ellos de manera que se muevan en su interior. Ve tanteando hasta que veas que la mujer alcanza el máximo de placer.
En este artículo donde te explicamos en detalle cómo masturbar a una mujer encontrarás más consejos interesantes.
A modo de conclusión
Masturbar a otra persona parece fácil, pero realizar una masturbación que resuene en su cabeza durante mucho tiempo requiere de técnica y habilidad. Si nunca has realizado una masturbación o no tienes demasiada práctica en ello, no te preocupes: Aquí te explicamos cómo puedes masturbar a un hombre o una mujer de manera que lleguen a sentir mucho placer. Poniendo en práctica estos consejos, marcarás la diferencia.