Cómo elegir el mejor calzado
Mucha gente sufre de los pies. Tener unos pies dolorosos puede ser muy incapacitante, pues nos dificulta llevar una vida activa y realizar las actividades cotidianas y diarias. Aunque el dolor puede tener diferentes tipos de causas, el calzado que llevamos puede ser una de ellas. Y es que en muchas ocasiones, elegimos nuestros zapatos motivados por la estética como único factor, y nos olvidamos de que debemos cuidar los pies para favorecer una buena salud y poder continuar con nuestro día a día de manera óptima.
Por ello, es esencial saber cómo podemos elegir el mejor calzado cuando vayamos de tiendas. En este artículo vamos a darte una información esencial; los consejos más importantes para saber cómo escoger tus zapatos cuando vayas de tiendas.
Si tu también sufres de dolor de pies, sospechas que es por el calzado y te gustaría saber cómo debes elegir tus próximos zapatos, te recomiendo que sigas leyendo este artículo. La información que obtendrás puede aliviarte, en gran medida, tu problema.
Toma nota y pon en práctica todo lo que aquí te contamos.
El calzado. ¿Estética o salud?
Quizas, si miramos en nuestro zapatero, con mucha probabilidad encontraremos diferentes tipos de zapatos, cada uno para una ocasión. Zapatillas de deporte, zapatillas de montaña, zapatos de diario, zapatos de tacón… Seguro, además, que todos los zapatos que tenemos son de nuestro agrado. Esto, que es totalmente normal, tiene un detalle escondido: ¿Son buenos zapatos? ¿Te resultan cómodos? ¿Te los pones a menudo, o evitas caminar con ellos? ¿Los prefieres frente a otros?
Si no has contestado a todas estas preguntas de manera positiva, quizás los elegiste en su día motivad@ por el factor estético, más que el cómodo. Y, aunque el factor estético está bien y es normal, tampoco debemos olvidarnos de su comodidad y del acople con nuestros pies.
Teniendo en cuenta que cada persona tiene un tipo de pie, resulta imprescindible encontrar aquellos zapatos que se acoplen bien al nuestro. De esta manera, podremos evitar problemas relacionados con el uso de zapatos que no estén hechos para nosotros, aunque sean muy bonitos. Y es que unos zapatos que no nos resulten cómodos pueden producirnos dolor de pies, rozaduras y heridas, juanetes, hongos y deformaciones.
Por ello, la estética y la salud forman un conjunto que debemos buscar a la hora de elegir nuestros zapatos. Probablemente, el calzado que cuente con estas dos características tenga un precio superior al calzado económico. No obstante, en términos de salud puede salir muy rentable.
¿Cómo elegir un buen calzado?
Elegir un buen calzado es fundamental para evitar o aliviar los problemas asociados. Existe mucha gente que no sabe que características debe buscar en un zapato cuando acude a comprarlo. A continuación vamos a darte unas ideas que te podrán orientar en tu tarea.
Consejos para elegir un buen calzado
1.Pruébate los zapatos
Resulta lógico, pero probablemente alguna vez hemos comprado unos zapatos sin probarlos, bien por las prisas o bien porque lo hemos hecho a través de internet o de catálogos. Probándolos es la única manera de saber si nos resultan cómodos, si nos aprisionan en algún lugar, si nos rozan o si nos acoplan bien.
2.Ve a la tienda con los calcetines correctos
Es muy recomendable que vayamos a comprarlos con los calcetines adecuados; si queremos comprar unas zapatillas de deporte, deberemos probarlas con los calcetines de deporte; si queremos unos zapatos de tacón, será muy recomendable acudir a la tienda con medias; en el caso de querer comprar unos zapatos de diario, resultará muy útil probárselos con los calcetines que solamos usar. De esta manera, podremos hacernos una idea de su acople en condiciones normales.
3.Fíjate en cómo te acoplan
Un calzado cómodo se caracteriza por un buen acople a nuestro píe. No existen dos pies iguales, y al mismo tiempo, casi todos los zapatos si lo son. Este es el principal problema a la hora de encontrar un buen zapato que nos acople a la estructura de nuestros pies.
Para comprobar si un calzado acopla bien, deberás probártelo y andar unos pasos con él. Realizar giros, caminar recto, realizar diferentes movimientos con el pie. Si no duelen, ni rozan, ni molestan, probablemente habrás encontrado tu zapato ideal. Si encuentras algún problema, por pequeño que sea, no es recomendable que los adquieras. Ten en cuenta que una pequeña molestia en el momento de probarlos puede suponer una gran molestia tras horas de uso.
Evitar cualquier roce es, también, otro valor a tener en cuenta. Si un calzado roza, no se está acoplando a nuestro pie. Debe evitarse.
4.Los dedos, sin ataduras
Un zapato que aprisione los dedos no resulta un zapato ideal. Los dedos deben quedar libres dentro de él, se deben poder mover sin rozar, y por supuesto, no deben estar apretados. Un zapato que modifique la postura normal del pie no es recomendable, pues puede modificar su estructura y provocar diferentes problemas.
5.En zapatos de tacón, no deben sobrepasar los 3cm
El tacón puede ser muy perjudicial para nuestra salud. Por ello, se recomienda que no sobrepase los 3cm de alto, y que sean lo suficientemente anchos para que el pie no baile sobre ellos. Los tacones que no cumplan estas características no deben llevarse durante largos periodos de tiempo.
Si te gustan los tacones altos pero no estás acostumbrada a llevarlos, quizás te interesará leer nuestro artículo «Cómo caminar con tacones altos«. Recuerda que no es aconsejable abusar de ellos.
6.Otros aspectos importantes
Aunque estos 5 consejos son los más importantes para garantizar que el calzado nos resultará cómodo, también encontramos otros aspectos que podrán marcar la diferencia:
- Es muy recomendable que la suela del calzado sea antideslizante, para evitar caídas y accidentes.
- Las suelas gruesas son más cómodas que las finas, pues amortiguan las pisadas.
- El material del calzado, así como la plantilla interior, debe dejar transpirar la piel. Si no es así, se acumula la humedad y puede causar hongos u otras bacterias.
- Es importante que sea flexible, pues nuestro pie se dobla al caminar. La zona de los dedos debe facilitar este movimiento.
- Es muy recomendable variar el tipo de calzado habitualmente. No abusar de un tipo de calzado ni de un mismo zapato puede impedir que el pie se deforme.
Una vez conocidos estos consejos y aspectos, buscar tus próximos zapatos puede ser una tarea más amena y fácil. Es importante evitar zapatos que no cumplan con nuestra comodidad, sobre todo si tenemos intención de usarlos mucho. Nuestros pies agradecerán la compra de un buen calzado.
A modo de conclusión
Nuestros pies hablan solos. En muchas ocasiones, estas extremidades presentan muchos tipos de problemas, entre los que destacan el dolor, las deformaciones y las bacterias que pueden causar hongos u otros problemas. Todo ello suele ocurrir por el uso de un calzado inapropiado, que no se adecua a la estructura de nuestros pies, o que va modificando su forma, generando cambios en nuestra pisada.
En muchas ocasiones, estos problemas se pueden evitar usando un buen calzado. Por ello, no basta con elegir los zapatos que más nos gusten cuando vayamos a adquirirlos. También necesitamos buscar una cierta comodidad y ajuste. De esta manera, elegir un calzado que combine estética con comodidad resulta la postura más adecuada, pues contribuirá a garantizar nuestra salud.
En este artículo te hemos ofrecido una serie de consejos y unos cuantos aspectos que te ayudarán a buscar y encontrar el calzado que respete la forma de tus pies, tu pisada y tu salud. Ponerlos en práctica puede hacerte encontrar unos zapatos bonitos, a la par de cómodos.