Cómo hacer besos apasionados
A la hora de expresar un sentimiento en concreto, tenemos muchas maneras de hacerlo. Pero, sin duda, la manera más efectiva y bonita de hacerlo es mediante un beso. Existen muchos tipos de besos, dependiendo del tipo de relación o del momento y de las circunstancias. En este artículo hablaremos de cómo hacer besos apasionados. Besar es muy importante en una pareja. Ya que transmite confianza y una cantidad emociones imposibles de expresar a través de otras formas. Se puede conocer a una persona por la forma de besar. Puesto que la información que recibimos es mucho más fiable al tratarse de un momento íntimo.
Tal es la importancia del beso que se da en cualquier momento. Ya sea un momento triste o una escena alegre. Hay besos que se dan por rutina dentro de una pareja y también para saludar. Infinidad de tipos con los que podemos transmitir. A parte de ser beneficioso para la salud, ya que entre otras cosas ayuda a reducir el estrés.
Los besos dependen en gran medida de las circunstancias y de la persona en sí. Es un amplio abanico de gustos en cuestiones relacionadas a este arte amatorio. A algunos les gusta besar de forma lenta, otros más rápido. Con lengua, sin lengua. La clave para dar un beso apasionado es marcar bien los tempos y la atmósfera. Prestando la debida atención a estos dos conceptos tendremos mucho terreno ganado. También para lograr un beso apasionado se puede hacer uso del ‘factor sorpresa’. Un beso robado sabe mejor para las dos partes. La parte que no se lo espera, al ser sorpresa, lo disfruta totalmente de otra manera. Puede que la pasión sea incluso más.
Los besos dados con más pasión son los más esperados. Por lo que es importante también tener en cuenta esta idea. Jugar con la espera y darlo en el momento oportuno es garantía de pasión.
Besos y pasos para darlos
Entorno
La atmósfera. Como hemos señalado anteriormente, la atmósfera es un factor clave. Dependiendo de la fase en nuestra relación o la historia en común que tengamos podemos propiciar un tipo de atmósfera. Conseguir esta atmósfera puede llevar una gran planificación o, simplemente, todo lo contrario. A veces el entorno adecuado se presenta ante nosotros y nuestra única tarea es reconocerlo y dar el gran paso.
Un buen plan como el que puede ser una cena romántica, una copa y un paseo. Esto es lo que se necesita, por ejemplo, para crear la escena adecuada. El beso se empieza a crear mucho antes de darlo en esta ocasión. Se trata, desde el principio, de ir preparando el terreno, de cocinar el beso a fuego lento. Una buena conversación con el debido contacto es un gran comienzo. Más importante de lo que decimos es cómo lo decimos. Que nos sienta cerca dependerá del tono, de nuestros gestos y de si al hablar tenemos contacto. Ya sea dando la mano, o acariciando su hombro, etcétera.
El perfume juega un papel protagonista. Un beso se da con los seis sentidos. Un consejo que damos en este artículo es estar bien perfumados, no en exceso. Un buen perfume hará que la otra persona esté más a gusto en las distancias cortas y aumenta el deseo.
Besar
El beso. Es el gran momento. Para dar un beso apasionado que deje a ambas partes temblando las piernas es importante dominar esta faceta. El primer paso es empezar de manera suave. Nos acercamos lentamente, mirando a los ojos a la otra persona para disfrutar del momento. Antes de dar el beso, nos mantenemos a escasos centímetros de sus labios. Esto hará que incrementen las ganas por ambos lados.
Pasada esta fase de acercamiento, empezamos a dar el beso de una manera muy sutil. Es importante no ir con la lengua ya fuera, como si de una serpiente se tratase. Ir como una serpiente, con la lengua en posición de ataque puede provocar la aparición de lo que llamamos ‘cobra’. El primer contacto puede ser un par de besos cortos y suaves, para después ir incrementando la intensidad y la duración de los mismos.
Durante el beso no gira todo entorno al beso en sí. También lo que hacemos con el resto del cuerpo. Ya sea de pie, sentados o acostados tener contacto es vital. Acariciar con las manos el pelo, entrelazar las manos, agarrar de la cintura. La posición de las manos ya dependerá de cada uno. Un gesto muy íntimo y que nos acercará más durante el beso es situar la mano en la mejilla de la otra persona.
Situaciones
Si es algo planeado, una buen ‘as’ en la manga es saber cómo le ha ido a la otra persona el día. Si ha tenido un día bueno o, por el contrario, ha pasado por varios problemas. Teniendo en cuenta esto, podemos adoptar la actitud indicada para cada situación. La clave es el estado en el que se encuentra la otra persona y el estado al que le queremos llevar. Preocuparnos por su bienestar no será, desde luego, una decisión desacertada.
Hay besos que se dan sin haberlo pensado. Simplemente surgen. Un buen enfoque es jugar con lo prohibido. En determinadas situaciones dónde la gente guarda una compostura o formalidad, podemos romper con eso en un momento íntimo. Si dentro de ese entorno nos encontramos en un espacio privado, podemos aprovechar el factor «prohibido» para aumentar el deseo. Cuando algo no está considerado como algo positivo, pero en realidad si lo es, resistirse a la tentación incrementa doblemente el deseo. En este punto ya conseguimos algo muy importante; un deseo difícil de frenar. Una vez en ese punto, sólo hay que dar los pasos correctos y disfrutaremos de un gran beso apasionado.
Consejos
Es importante no precipitarse, ni tampoco hacerlo esperar demasiado. A veces es difícil medir los momentos, pero si prestamos la atención adecuada estamos más cerca de saber interpretarlo. No debemos tener miedo ni preocuparnos por ser rechazados, pero los preliminares al beso nos acercan más al éxito. Los besos, al igual que los abrazos tienen mucha importancia en nuestro día a día. Gracias a ello estamos más cerca de ser feliz.
Interpretar las señales. Una buena conversación e intentar que haya un poco de contacto nos pueden ayudar a sacar algunas conclusiones.
La higiene también es muy importante. Si planeamos una cena debemos pensar los ingredientes de los platos que vamos a comer. Es aconsejable pedir una comida suave y que no nos provoque mal aliento. Por otro lado, también es una buena solución los chicles. Si no podemos lavarnos los dientes, un chicle refrescante es el compañero ideal para dar un beso en condiciones.
Los pequeños detalles cuentan. A veces nos cegamos en las grandes acciones o los factores determinantes. Pero, más de lo que creemos, los pequeños detalles determinarán el resultado. Pero, más de lo que creemos, los pequeños detalles determinarán el resultado. Al igual que un buen conjunto depende también de los accesorios, un buen beso depende también de todo lo que le rodea. Un buen perfume, un buen look, una gran velada y la actitud adecuada pueden conseguir el beso deseado. Si el pelo largo nos molesta a la hora de dar un beso, seguramente querremos saber cómo hacer recogidos con el pelo corto.