En el mundo de las dietas, encontramos dietas de todo tipo. La mayoría de ellas intentan equilibrar el peso corporal eliminando ciertos alimentos de nuestra comida; otras, basan la dieta en un alimento casi en exclusiva, porque tiene grandes propiedades para el organismo. Y también existen un grupo de dietas que basan su efectividad en el ayuno, es decir, en no tomar alimentos sólidos, durante un tiempo. La dieta de la luna pertenece a este último grupo de dietas.
El ayuno es una práctica que se viene realizando desde hace muchos años atrás; consta en los documentos que muchas religiones tenían mandado realizar este día de ayuno por sus sábios. El objetivo con este ayuno era limpiar el organismo de impurezas y toxinas, al depurar agua y no reponer las reservas de comida. Y aún hoy, existen religiones que siguen realizándola, como la población musulmana y los Pueblos Islámicos.
Para realizarla, se debe de tener muy en cuenta la fase lunar en la que nos encontramos pues debe empezarse un día marcado de esa fase lunar. Quien quiera realizarla debe creer en el poder que tiene la luna y los astros para interferir en nuestro organismo, pues si no cree, difícilmente va a poder llevar una dieta como esta.
Si estás buscando una dieta para adelgazar de manera rápida, con aires místicos, que conecte a los astros con las personas, te invitamos a seguir leyendo este artículo pues seguro que resulta de tu interés.
La dieta de la luna
Esta dieta tiene un punto básico: el ayuno.
Se debe ayunar los días en que haya luna Nueva y Llena, y mantener ese ayuno durante 26 horas.
El ayuno significa no comer nada sólido, pero si que se permite beber, para mantener la hidratación del organismo. No se permite diluir alimentos en la bebida, más que fruta. Ni azúcar ni otros alimentos batidos.
Algunas características de esta dieta son:
- Se debe realizar mínimo 15 días. Se puede prolongar en el tiempo hasta que nosotros decidamos, e incluso indefinidamente.
- La dieta se basa en la teoría de la luna y su influencia con las mareas; los líquidos del organismo se asemejan a las mareas en cuanto a sus ritmos. Por ello, la luna puede hacer en nuestro organismo el mismo efecto que realiza con las mareas, aunque a menor escala.
- Con esta dieta, desintoxicamos el hígado y esto tiene sus consecuencias médicas; la más importante es la bajada del colesterol.
- El día de ayuno se pierden entre 2 y 3 kilos, que será difícil recuperarlos siempre y cuando la dieta que hagamos en los días permitidos sea equilibrada. Además, permite curar al cuerpo de las toxinas recibidas y recuperar y prolongar las características juveniles de la vida.
- No resulta una dieta peligrosa pues el tiempo de ayunas no es peligroso. No obstante, podemos consultar al médico sobre ella.
- Puede ser normal que, tras el día de ayuno, se produzca algún rechazo a comer carne animal.
¿Cómo sabemos que día empezar la dieta?
Para saber que día empezar la dieta, deberemos regirnos por un calendario lunar. Por internet podremos encontrar sin problemas. En este calendario debemos buscar los días de luna Nueva y Llena, y realizar el ayuno en esos días.
La dieta de la luna. Dos tipos de dieta.
Esta dieta implica realizar dos tipos de alimentación dentro de ella:
Día del ayuno:
Ayunar.
Privar al cuerpo de alimentos para favorecer su depuración.
Es muy importante que vayamos orinando a lo largo del día, para eliminar las toxinas que el cuerpo tiene acumuladas. Para facilitar el proceso de orinar, se podrán beber líquidos.
¿Que podemos consumir el día de ayuno?
- Agua
- Infusiones frías o calientes de hierbas naturales
- Zumos de fruta natural. Las frutas deberán ser ciruela, manzana, naranja, papaya, pomelo y piña. Deben de estar perfectamente filtrados, no deben contener pulpa.
- Caldos de verduras: Muy filtrados, sin sal.
¿Que no podemos consumir el día de ayuno?
- Sal
- Azúcar
- Edulcorante
- Refrescos gaseosos (tampoco versiones light y zero)
- Otras bebidas que no sean zumos bien filtrados, agua y/o infusiones naturales.
- Los zumos industriales, pues suelen llevar azúcar y más elementos.
- Derivados lácteos, como leche, queso…
- Café
- Chicles
- No fumar
En este grupo se incluye también las versiones light o «sin azúcar» de estos productos, pues tienen otras sustancias que pueden maniobrar en la dieta.
Días anteriores y posteriores al ayuno
Los días anteriores y posteriores, deberemos mantener una dieta equilibrada que nos aporte todos los nutrientes que necesita el cuerpo para poder trabajar de manera óptima. Las frutas, las verduras, los arroces, la pasta, las carnes, los pescados, leches y quesos vegetales son muy saludables y por tanto deberemos consumirlos en los días de no ayuno. Todos los alimentos deben tener la misma importancia que le ofrece la pirámide alimentaria.
Puede realizarla cualquier persona siempre y cuando…
...no sea menor de edad (aunque puede realizarse con supervisión profesional), mujeres embarazadas (privar al organismo de alimento es también privar al feto de los nutrientes que necesita); madres que practican la lactancia, personas con gripe, fiebre (si actualmente tienes fiebre, te interesa leer «Remedios caseros para bajar la fiebre«) o anemia y/u otras enfermedades crónicas como diabetes (lee aquí como controlar y prevenir la diabetes), corazón…
Por ello, antes de realizar esta dieta, es muy recomendable visitar al médico para que nos aconseje sobre si podemos realizarla o no, en función de nuestra historia clínica y personal.
Consejos para realizar la dieta
Bebe mucha agua.
El agua permitirá eliminar las toxinas del organismo. Reparte la ingesta durante todo el día.
Come fibra.
Sentirás menos hambre, porque prolonga la sensación de saciedad por más tiempo.
Come cantidades moderadas
Las cantidades de comida deben ser moderadas y se debe ingerir alimentos cada 2 o 3 horas.
Pesate siempre a la misma hora.
El cuerpo no siempre está estable. Por ello, pesarte a la misma hora es crucial para tener un cálculo exacto de tus avances. Evita pesarte vestida (y si no lo puedes evitar, intenta que siempre sea la misma ropa) y antes de comer o después de evacuar.
Incluir verduras depurativas y nutritivas en la dieta
Por lo menos tres veces a la semana. Las verduras ideales son las coles, coliflor, brócoli, cogollos de bruselas, rúcula, rábano, nabos…
Sustituir grasas
Sustituir las grasas de origen animal por aquellas saludables, como el aceite, los frutos secos y algunas legumbres.
En el ayuno
En el día de ayuno, se debe controlar nuestra mente y no caer en la tentación de comer sólido. Probablemente será el día que más nos apetezca comer, sobre todo aquellos alimentos hipercalóricos. Muchas veces no bastará con tenerlos en casa; la mente se acordará de ellos constantemente. Saber ejercer un control sobre ella es básico para poder impedir que el ayuno se rompa mediante un impulso.
Control médico
Toda dieta debe ser acompañada de analíticas para comprobar que el cuerpo está recibiendo todas las sustancias que necesita. Saber que los valores están estabilizados nos informa de la calidad de la alimentación que estamos siguiendo.
Deporte
La dieta, en los días de no ayuno, debe acompañarse de deporte siempre y cuando sea posible. No necesariamente debe ser extremo; puede ser moderado, de manera que andar 30 minutos a paso ligero cada día o cada dos días puede considerarse un buen deporte que ayude a acelerar el proceso de pérdida de peso, o que dificulte la ganancia de kilos en los días de no ayuno. No es recomendable realizar deporte en los días de ayuno, pues el organismo no recibe calorías y por tanto sería apretar demasiado la maquinaria.
El deporte más recomendado para perder peso es el deporte cardiovascular. Si realizamos deporte, sabremos que estamos perdiendo peso cuando las pulsaciones del corazón aumentan mínimamente. Deberemos buscar el equilibrio entre el aumento de pulsaciones y la poca fatiga, pues este es el punto que no deberemos perder.
A modo de conclusión
La dieta de la luna es una dieta que, como su propio nombre indica, se basa en la influencia de este astro para controlar los líquidos corporales, pues estos están influenciados por las mareas y se considera que la luna es quien las dirige.
Bajo este supuesto, la dieta propone pasar días de ayuno completo, permitiendo tan solo ingerir líquidos como agua, infusiones naturales o zumos naturales de frutas muy licuados, de manera que la pulpa no pase al organismo. Estos días deben coincidir con los días de Luna Nueva y Luna Llena. Además, el ayuno debe durar 26 horas.
Los días anteriores y posteriores al ayuno deberemos realizar una alimentación normal, cumpliendo las bases de la dieta mediterránea e introducir en el organismo los alimentos que le aportan los nutrientes necesarios, en su justa medida para que no falte ni sobre. Comer los alimentos en función de lo que nos recomienda la pirámide alimenticia, y realizar ejercicio cardiovascular son claves para poder perder peso de una manera más rápida y verse bien en el espejo, con un cuerpo tonificado y bonito.
Por último, recordar que toda dieta debe llevar siempre un control médico paralelo; es muy recomendable realizar analíticas cuando llevemos un tiempo con el plan alimenticio, para comprobar si el organismo está recibiendo todos los nutrientes que necesita.