Cómo ser fotogénico
Hay quienes sin esfuerzo alguno salen bellos en las fotografías y nos hacen preguntarnos cómo ser fotogénico. Y están quienes a pesar de las poses no logran reflejarse en el momento. Siempre que nos toman una fotografía queremos salir como supermodelos, indistintamente de la ocasión y hasta del fotógrafo. No es una novedad que queramos salir lo mejor posible siempre, con nuestro mejor ángulo. Entonces, ser fotogénico no tiene que ver con ser bello o sentirse guapo.
En el mundo actual, donde reina el instagram y los selfies, ser fotogénico es un asunto vital. Todos queremos estar en las redes sociales dejando nuestra mejor imagen. La buena noticia es que ser fotogénico no es sólo una condición innata y puede entrenarse. Para lograrlo, es importante tener en cuenta:
- Estúdiate y conócete a ti mismo.
- Controla los detalles.
- Cuenta con un buen fotógrafo.
Ser favorecido por la acción de la luz y dejar una buena imagen de video o fotográfica no depende solamente de ser fotogénico. Y hay que reconocer que no siempre que andamos guapos saldremos fotogénicos, pues esta es una imagen bidimensional de un instante. Ser fotogénico entonces, es saberse reflejar justo en ese micro instante que será capturado por la cámara. Y aprender a hacerlo siempre.
Ahora, ser fotogénica no tiene por qué ser algo autodidacta, tienes un gran aliado: el fotógrafo. Con sus conocimientos sobre los ángulos de la luz y una miradita previa por el lente puede hacerte más fotogénico en segundos. Recuerda que la belleza te pertenece solo a ti pero la fotogenia es entre tú y quien toma la fotografía.
Lo primero
Reconocerse ante la fotografía
Para ser fotogénico es importante revisar como sales normalmente. Cuáles son las poses y momentos que han salido mejor. Con qué tipo de ropa quedan más lindas tus fotografías. De qué lado te has visto más guapo en las fotos. Incluso en qué tipo de fotografías te ves más fotogénico.
Estudiarte es importante. Por eso están las dos estrategias, revisar las fotografías anteriores y tomarte muchas fotos de práctica para evaluarlas. Hay que recordar que la fotografía es el reflejo de un momento determinado. Por ello, no sólo es importante reconocer tus propias características, sino revisar los escenarios y momentos que mejor te sientan. Tómate selfies y pide fotografías en todos los momentos y ocasiones que puedas, con diferentes atuendos. Posa cada vez de manera distinta, evalúa cada foto con sus aspectos positivos y negativos para mejorar a la siguiente oportunidad.
Cuida siempre que cada fotografía sea diferente, para no caer en la monotonía. Igualmente, evita las poses montadas y constantes. Estos errores te pueden pasar de fotogénico a aburrido y artificial.
Dicen los abuelos que las fotos reflejan el alma. Por eso para ser fotogénico sólo tienes que reflejar tu belleza natural. Esa que viene desde adentro y que refleja también tu estado de ánimo de manera auténtica. Debes saber que ser fotogénico en ambientes caóticos o en situaciones negativas forma parte de la naturalidad. Por ello, es que para ser fotogénico se recomienda evitar las fotografías posadas en situaciones tristes y ambientes caóticos.
Control de los detalles
Para aprender a ser fotogénico debes controlar todos los detalles de ti mismo en una fotografía. Y es que son muchas las características que se han de tener en cuenta para ser fotogénico, veamos algunas de las más importantes:
- Los ojos.
- La sonrisa.
- Las poses.
- La autoimagen.
- Los brillos.
Esos 5 aspectos son los más vistos en cualquier foto sea individual o grupal. Y a su vez son los que pueden hacerte ver muy mal o muy fotogénico.
Los ojos, detalle crucial de un extremo a otro
Saber cómo ser fotogénico, es mantener los ojos en el punto preciso de apertura. Los mayores defectos en la fotos suelen ser salir con los ojos cerrados, dormidos o rojos. Sin embargo, los ojos demasiado abiertos o mirando en un ángulo equivocado son comunes en quienes no son fotogénicos.
- Cerrar los ojos: Justo en el momento de la fotografía los ojos se cierran o nos hacen parecer dormidos. Este es un efecto ocasionado por la entrada inusual de luz que no permite una adecuada dilatación de la pupila. Para evitarlo parpadea justo antes de que tomen la fotografía. También, puedes mantenerlos cerrados hasta que tomen la foto, pero para ello necesitaras la ayuda del fotógrafo contando hasta 3. Otro truco es mirar hacia una luz antes de que tomen la fotografía. Así, el efecto de ojos cerrados se eliminará por cuanto la entrada de luz no será sorpresiva con el flash.
- Los ojos rojos: La pesadilla de los fotógrafos del ayer. Hoy en día existen dispositivos fotográficos para eliminar los ojos rojos una vez tomada la foto. Incluso algunas cámaras tienen un juego de luz anterior al flash para evitar los ojos rojos. Pero si quieres evitarlos para estar segura, sólo observa una luz antes de la fotografía. Esto hace que la pupila ya se encuentre adaptada y reducida y por tanto se elimine el ojo rojo.
- Los ojos demasiado abiertos: Para evitar los ojos cerrados, muchos optan por abrirlo de forma antinatural. Esto no te hará fotogénico, te hará pasar de un extremo a otro. De ojos cerrados o dormidos a parecer desorbitado o alocado por ojos demasiado abiertos.
- Ojos fuera de ángulo: Procura una mirada que vaya en conjunto con tu pose. Muchas veces inclinamos la cabeza y dejamos la mirada en la posición inicial.
La sonrisa, el espejo del alma y la forma de ser fotogénica
Ya hemos dicho que la sonrisa refleja el estado de ánimo real de una persona. Incluso cuando no se siente deseos de sonreír, el gesto alrededor de la boca dice cómo nos sentimos. Para ser fotogénico, hay que manejar muy bien esta acción. Pues una sonrisa falsa, te puede quitar la fotogenia, tanto como una sonrisa exagerada. Nadie quiere una fotografía con una sonrisa del joker. Lo deseable es una sonrisa comedida que denote la alegría del momento. Y por qué no, si se requiere seriedad, la sonrisa adecuada no te restará.
Hay dos trucos vitales para tener una sonrisa fotogénica. Se trata de poner la lengua en la parte superior detrás de los dientes para sonreír y de sentirse en confianza con el fotógrafo. Si tienes la oportunidad de preparar la fotografía, lo recomendable es conversar con el fotógrafo. Al entrar en confianza, de seguro llegará una genuina sonrisa a tu rostro, que podrá ser capturada. Si no es el caso, o es una toma sorpresa, entonces el truco de la lengua es para ti.
Sobre todo ser natural
De buenas poses se logra ser fotogénico
No en vano, han pasado toda tu adolescencia diciéndote que te endereces. Y es que ser fotogénica y adoptar una buena postura parecieran ser sinónimos. Una buena postura es vital, incluso cuando se va a fotografiar sólo el rostro. Los mejores tips para manejar una buena pose son:
- Siempre ve la cámara de manera directa. Si es una foto de perfil, entonces ve al horizonte, pero no mires a la cámara de lado o por encima del hombro.
- Mira de frente sin colocarte de frente. Aunque debas ver directamente la cámara, tu cuerpo no tiene por qué tener la misma dirección de tu cara. Coloca tu cuerpo ligeramente hacia un lado y dobla el cuello un poco hacia la cámara.
- Hombros hacia atrás y hacia abajo. El cuello más largo y erguido se consigue en los hombros. Un truco para colocar bien los hombros es cruzar las manos a la altura de la cadera. Otra forma es colocar las manos estilo alfombra roja sobre las caderas. Así, los hombros siempre te estilizaran.
- Saca pecho y trasero. Un poco exagerado y dependiendo de la ocasión te puede servir para ser fotogénica.
La Imagen que proyectamos para ser fotogénico
Como hemos dicho, a pesar de ser dos cosas distintas, ser fotogénico se asocia a ser bello. Por lo tanto, no se puede ser fotogénico si tu aspecto siempre es desaliñado. Aunque alguna característica particular pudiera darle personalidad a tus fotos, como un poco de frizz que siempre te acompañe. Si tu aspecto es siempre desaliñado con ropas inadecuadas o sucias, a menos que se trate de un indigente, no llegarás a ser fotogénico.
Asimismo, se debe cuidar del maquillaje, un rostro libre de impurezas con maquillaje excesivo puede arruinar una fotografía. Por ejemplo, el maquillaje correcto puede hacer de la cenicienta una princesa en cada fotografía. La clave es usar siempre un poco de máscara en las pestañas para dar un look atrevido a los ojos. Y para unos labios fotogénicos los brillos tenues y colores suaves son los mejores aliados.
Vistos la ropa y el maquillaje, solo queda el cabello como parte de la imagen. Que puede estar suelto o recogido, corto o largo pero siempre peinado y con algo de volumen.
Brillo
De los más fatales defectos fotográficos es salir siempre brillante. Esto se logra porque ante la luz artificial salen a relucir los aceites naturales que se encuentran en la piel. Dando un aspecto desaliñado o desaseado en la fotografía. Para ser fotogénico debes evitar salir con piel brillante en cada toma. Para ello:
- Antes de la fotografía pasa un papel suave por el rostro. Mediante toques suaves que no eliminen el maquillaje si es el caso. Esto eliminará el brillo momentáneamente.
- Optar por dar un retoque de maquillaje con polvo compacto o alguna base seca. Pero ojo, porque esto alterará tu color de piel. Así que si tomas la opción del polvo, cuida que sea de la tonalidad adecuada, pues los tonos más claros te harán parecer un fantasma en todas las fotografías.
Cuestión de actitud
Finalmente, si no sabes cómo ser fotogénico, tienes que reconocer que es cuestión de actitud. Cómo te sientes cada vez que se trata de tomar una foto. La mayoría de las personas que se creen poco o nada fotogénicas se esconden al momento de una fotografía. Sin embargo, la acción debería ser al contrario. Ser fotogénico es actitud y probabilidad. Mientras más fotografías te tomes más fotogénico podrás ser. Entonces, de ahora en adelante, cada vez que aparezca un fotógrafo, salta ante la cámara y pon tu mejor cara. Total lo peor que puede ocurrir es que salga mal. Como ventaja ahora no se usa rollo, así que no importa cuántas veces haya que repetir.
Ser fotogénico no es sólo actitud ante la fotografía de ese momento. Es actitud ante el hecho fotográfico y ante la propia vida. Disponte a que vas a salir guapo, a que se va a reflejar lo mejor de ti. Disfruta la fotografía como un instante irrepetible. Regálate cada segundo de una fotografía como un gran suceso. Y finalmente, si aún crees que no eres fotogénica, relájate y muéstrate con total naturalidad. Así saldrá toda tu belleza en una imagen.