Faringitis – Cómo aliviar la faringitis
Aliviar la faringitis es importante para mejorar sus síntomas ya que produce la inflamación de la faringe. Ésta última, es el órgano o conducto que forma parte del tubo digestivo que comunica la boca con el esófago. Cuando se presenta la faringitis, el proceso inflamatorio doloroso ocasiona molestias en la zona posterior de la garganta.
Todos, alguna vez hemos sufrido algún evento de faringitis, debido a que es un padecimiento muy común. Generalmente, más frecuente en niños que en adultos.
Para aliviar la faringitis debemos conocerla
Sus causas
La faringitis es causada por muchos factores diferentes y de acuerdo a ello generar síntomas muy variables o floridos. Sus causas pueden ser:
- Infecciones virales
- Procesos infecciosos bacterianos
- Agentes causales o condiciones ambientales. La faringitis, se presenta con mayor frecuencia en el invierno que en las demás estaciones. Ya que, es en éstos meses cuando habitualmente aparecen los resfriados, las gripes y otras infecciones de la parte alta del aparato respiratorio.
Manifestaciones clínicas de la faringitis
La faringitis, además, es un síntoma, que caracteriza a muchas enfermedades y es patonogmónica en las gripes y resfriados.
Por lo general, aliviar la faringitis resulta fácil, porque se puede mejorar sin complicarse. Aunque es importante tratarlos a tiempo y no ignorar sus manifestaciones clínicas. Ya que, en algunos casos pueden ser indicio de posteriores enfermedades más graves.
De tal modo que sus síntomas pueden presentarse de diversas maneras, como:
- Síntomas de resfriado común.
- Fiebre.
- Congestión.
- Inflamación de los ganglios linfáticos.
Clasificación
La faringitis puede clasificarse en:
- La faringitis aguda. Que es su forma más común de presentación, aparece de manera brusca y su periodo de duración oscila entre los tres a siete días.
- Faringitis crónica. Cuya característica fundamental es el tiempo de duración que es mucho más largo. Puede durar más de tres semanas y puede ser la manifestación o el síntoma de otro problema causal. Por ejemplo, puede ser ocasionado por una sinusitis o una mononucleosis infecciosa que afectan la faringe.
¿Cómo podemos aliviar la faringitis?
El tratamiento adecuado y aliviar la faringitis va a depender en primer lugar de que podamos identificar bien su causa.
-
Faringitis viral
Es la forma de faringitis que se presenta con mayor frecuencia. Ya que, los virus son capaces de producir de un 90 a 95% de todos los casos de ésta enfermedad. De esa forma, son causantes de la gripe y de resfriados que ocasionan como consecuencia procesos de faringitis. Y entre los síntomas que pueden generar, podemos identificar los siguientes:
- Odinofagia o dolor de garganta. Que puede hacerse manifiesta de maneras muy variadas, que pueden ir desde una simple molestia hasta un dolor muy fuerte. Además, puede presentarse cuando se habla, se traga saliva, se respira, se beben o se comen los alimentos.
- Secreción nasal.
- Tos.
- Congestión en vías aéreas superiores.
- Disfonía o ronquera.
- Fiebre.
- Inflamación de los ganglios linfáticos regionales, ubicados en el cuello.
- Conjuntivitis o inflamación de la mucosa conjuntival de los globos oculares.
-
Faringitis producidas por adenovirus
Su periodo de duración es de aproximadamente una semana, donde podemos evidenciar los siguientes síntomas:
- Tos.
- Secreción nasal.
- Aparición de manchas blancas en las amígdalas y la garganta.
- Episodios de diarrea leve.
- Vómitos.
- Erupción o rash cutáneo.
-
Faringitis por virus Coxsackie
- Dolor de fuerte intensidad. El tipo de faringitis que éste virus produce, causa una afectación importante. Y puede llegar a causar una enfermedad llamada herpangina, que es una infección sumamente dolorosa que afecta a la faringe. La misma, afecta más a los niños alrededor de los 10 años de edad. Y suele presentarse en los países con estaciones durante los tiempos de verano e inicios del otoño. Así, que la odinofagia o dolor de garganta que caracteriza ésta faringitis es de muy intensa y ocasiona limitación funcional. De tal modo, que dificulta la deglución y conlleva a trastornos del apetito. Por lo que, fundamentalmente en los niños, que rechazan comer y beber por el dolor, hay que prevenir y tratar la consecuente deshidratación.
- Fiebre con elevadas temperaturas. Este virus tiene un periodo de incubación aproximado, de tres a seis días, después que ha ocurrido la exposición al virus Coxsackie. Luego de los cuales, el infectado sufre una faringitis repentina que se acompaña de fiebre alta que va de 38,9 a 40 °C.
- Ampollas blancas en la mucosa oral y faríngea. Además, se hacen presentes las ampollas de color blanquecino o grisáceo en la garganta y en la boca. Posteriormente, estas molestas lesiones se rompen y se van convirtiendo en pequeñas úlceras que generan mucha molestia.
- Vómitos y dolor abdominal. Síntomas que se presentan habitualmente en los afectados que han desarrollado la hepargina y tienen mal estado general.
-
Faringitis producida por mononucleosis infecciosa
La mononucleosis se conoce como la enfermedad del beso y es una infección muy habitual en los adultos jóvenes. Por eso, se ha estimado que entre un 85 a 95% de las personas, ya han tenido mononucleosis infecciosa al llegar a los 35 o 40 años de edad.
Casi siempre sus síntomas son leves, sobre todo en los niños, donde pasa diagnosticada como un resfriado común. Sin embargo, en los adolescentes y adultos, los síntomas son un poco más agresivos y la faringitis es uno de los más marcados.
Otros síntomas que aparecen en la mononucleosis son:
- La secreción nasal.
- Tos.
- Fiebre.
-
Faringitis bacteriana
- La faringitis por Estreptococos. Estas faringitis, representan de un 5 a un 10% y son ocasionadas por bacterias. En primer lugar, se encuentra el Estreptococo del grupo A, entre las bacterias que la producen. Dichos agentes bacterianos son los causantes de las amigdalitis estreptocóccicas bacterianas, que aunque son más frecuentes en niños escolares, puede infectar también a personas de otras edades. En éste caso, el tratamiento debe ser prescrito por un médico que determine cuál es el antibiótico indicado.
- Gonorrea faríngea. Es una faringitis bacteriana de afectación casi siempre severa, contagiada por transmisión sexual. De modo tal, que es adquirida al mantener sexo oral con una persona infectada de gonorrea e infecta la garganta.
-
Faringitis no infecciosa
Son todos aquellos casos de faringitis cuya etiología no es infecciosa. Por ejemplo, las contraídas por causa de procesos alérgicos o por irritantes de las vías aéreas que pueden producir faringitis. En tal sentido, pueden ser ocasionadas por rinitis alérgicas y otras alergias que irriten los senos paranasales. Los factores ambientales y de otro tipo que involucren agentes contaminantes o tóxicos, como el tabaquismo activo o pasivo. Ya sea, directamente en fumadores o secundariamente por inhalación pasiva del humo de tabaco. También, por la inhalación de aire contaminado y de sustancias químicas, ingestión de sustancias irritantes o que produzcan quemaduras o erosión en la garganta.
Por otro lado, cuando se habla de elementos ambientales, se hace referencia al aire seco. Como el de los hornos de aire caliente o el de los aviones, que causan faringitis porque afectan vías aéreas. Además, los cambios bruscos de temperatura, como la exposición a rudas corrientes de frío que pueden dar origen a faringitis. Ninguna de éstas, por ende se pueden contagiar, ya que no son debidas a agentes patógenos sino a factores ambientales.
Tratamientos paliativos para aliviar la faringitis
¿Qué medidas podemos tomar en casa?
Estas son medidas muy útiles para aliviar la faringitis y mejorar sus síntomas, independientemente de la causa que la produzca. Por lo que podemos aplicarlas ante cualquier causante de la faringitis:
Gárgaras calientes. Que se realizan con un té preparado muy fuerte o agua y sal, pero la condición es la elevada temperatura. La que debe ser tolerable, caliente y preparada en aproximadamente 200 ml de agua.
La ingesta de líquidos abundantes para garantizar la hidratación.
Comer un polo o helado congelado que ayuda a descongestionar y aliviar la garganta.
Tomar alimentos suaves, líquidos y nutritivos, de fácil deglución y digestión.
Descansar todo lo que el cuerpo solicite y recuperar la actividad progresivamente.
¿De qué manera podemos aliviar la faringitis?
Como ya hemos venido diciendo, el mejor tratamiento para aliviar la faringitis va a depender de la causa.
1. No es necesario automedicarse con un pastillero
En el caso de la faringitis viral, lo mejor es que la dejemos evolucionar sin tratamiento farmacológico. Por lo general, se autosuprime en pocos días, una vez que los virus cumplen su ciclo de vida y mueren. En éste sentido, lo mejor que podemos hacer para ayudar a nuestro organismo a defenderse de los virus, es tomar muchos líquidos, ya que, mantener la hidratación adecuada, que en estos procesos es necesaria porque los requerimientos se aumentan, debido a la presencia extraña de las partículas virales que viven a expensas de nuestras células. Además, tengamos claro que los antibióticos, no van a actuar sobre la faringitis viral; por lo tanto no disminuye la duración de la enfermedad, ni reducirá o mejorará los síntomas.
2. Descansar es fundamental
Por otro lado, guardar reposo absoluto es indispensable, porque aparte de que el mismo cuerpo lo pide, resulta totalmente necesario. Recordemos, que los virus al vivir a expensas de nuestro organismo, están debilitando significativamente nuestro sistema inmunológico. Con lo cual, la capacidad de funcionamiento de nuestras células, tejidos y órganos, se ve mermada temporalmente. Por eso, cuando descansamos todo cuanto necesitemos, le estamos permitiendo a nuestro cuerpo reducir sus exigencias de energía y requerimientos. Con ello, le incrementa a posibilidad de concentrarse en defenderse del virus que lo infecta y recuperarse más rápido.
3. Hagamos caso de nuestras sabias abuelas
Existen desde tiempos muy remotos, tratamientos alternativos como plantas medicinales y vitaminas, que se utilizan para la faringitis viral. La mayoría de ellos, centran su mecanismo de acción en el fortalecimiento y reforzamiento del funcionamiento del sistema inmunológico. Dichas estrategias, en su conjunto, buscan de aliviar al máximo los síntomas y acelerar la curación.
A tomar nota…
Algunos de estos remedios caseros, por demás excelentes para la recuperación, son:
-
Para la nutrición
Que bien en todas partes del mundo se maneja con diferentes especialistas de diversas ramas y en América es además una especialidad médica. Pero, parte del principio común y del concepto de que “somos lo que comemos”. Con lo cual, aporta una serie de recomendaciones muy valiosas desde el punto de vista nutricional. Todas ellas, muy útiles para combatir cualquier síndrome viral y en éste particular ayudarán a aliviar la faringitis. Aquí, está bien justificado el hecho de administrar micronutrientes, vitaminas, minerales y otros oligoelementos, orientados a favorecer la actividad inmunitaria.
Incluyen, la toma de suplementos de vitamina C y zinc 3 o 4 veces al día, bioflavonoides, vitamina A y otros betacarotenos. Además, de por supuesto una alimentación que en el estado de enfermedad va a estar basada fundamentalmente en dieta líquida. Y en tal caso blanda, tomando en cuenta el toque importante que genera la faringitis al estado general. Donde el paciente refiere que no le provoca nada, dar nutrientes con propiedades sanadoras, aportados principalmente en zumos y sopas. Lo que resulta ser de vital importancia que conozcamos y empleemos alimentos funcionales como ajo, limón, cebolla, salvia, kiwi, etc.
-
Fitoterapia o terapia con plantas medicinales
Utiliza infusiones y el consumo de raíces como el jengibre, Ligusticum porteri y Ulmus rubra, para aliviar los síntomas. Ya que tratan internamente la infección y calman el dolor.
-
Homeopatía
Trata las faringitis con diluciones super diluídas de belladona, phytolacca o jazmín amarillo.
-
Medicina ayurveda
Indica la preparación de gárgaras de agua con sal y cúrcuma u otros astringentes naturales como el zumaque, la salvia, o la myrica.
-
Aromaterapia o terapia con aromas
Esta recomienda la inhalación de las fragancias de aceites esenciales de tomillo, lavanda, eucalipto, salvia y sándalo.